En la clase de hoy, hemos trabajado los antagonismos y contrarios, es decir, hacer lo contrario de lo que se dice, o decir o contrario de lo que se hace.
Actividad:
Primero, hemos hecho una ronda de respuestas a preguntas del profesor, teniendo que decir sí o no con la voz, y realizando con la cabeza el gesto contrario a la respuesta que damos. Esto también se puede trabajar con empujar-tirar, arriba-abajo, izquierda-derecha, verdad-mentira, dentro-fuera...
Actividad:
Primero, hemos hecho una ronda de respuestas a preguntas del profesor, teniendo que decir sí o no con la voz, y realizando con la cabeza el gesto contrario a la respuesta que damos. Esto también se puede trabajar con empujar-tirar, arriba-abajo, izquierda-derecha, verdad-mentira, dentro-fuera...
Es curioso como a los adultos nos cuesta mucho hacer lo contrario de lo que decimos, ya que tenemos interiorizado lo que se nos enseña y a "no llevar la contraria", por lo que nos alejamos tanto de nuestra zona de confort que nuestro cerebro entra en un estado como de bloqueo en el que hay que parar a pensar qué es lo contrario de lo que estamos acostumbrados siempre a hacer.
Es por eso que, es muy importante trabajar con los niños a través de la música, ya que ambas partes del cerebro se conectan y son capaces de entender y tocar y cantar a la vez.
Cada una de nosotras ha tenido que inventar una actividad con todo lo de los contrarios, y la mía es la siguiente:
Haciendo un corro todos juntos de la mano, hay que hacer lo contrario de lo que una persona fuera del corro mande, y el que se equivoque, reemplaza al que manda, de forma que en todo momento todos estén participando en el juego.
Hay varias opciones de trabajar los contrarios:
-Decir lo contrario y hacer lo que digo
-Decir lo que digo y hacer lo contrario
-Hacer lo contrario y decir lo que digo
-Hacer lo que digo y decir lo contrario
Con esto podemos ver que, a medida que nos alejamos de nuestra zona de confort, es decir, de nuestra zona fácil, controlable y d poder, más nos cuesta reaccionar y hacer y entender lo que se nos pide.
Tras esto, hemos jugado con rimas, teniendo cada una de nosotras que inventarse una rima-adivinanza cuya respuesta debía ser adivinada por las compañeras, mientras el profesor nos acompañaba con el piano.
Como actividad para casa, teníamos que elegir un tema a tratar en la escuela a través de la música, de canciones. Por ello, he decidido tratar el tema de los planetas:
Ocho son los planetas, sí
Mercurio es el primero,
y Venus va después,
Tierra va tercero,
Marte va en el medio, yeh.
Júpiter ya es quinto,
Saturno ya es el seis
Urano casi el último,
y Neptuno in the end.
Ahora queda Plutón,
que un planeta ya no es,
pero siempre le recordaremos,
siempre, siempre, allí donde esté.

No hay comentarios:
Publicar un comentario